Los supermercados siempre han tenido que soportar robos de toda índole, y más en los últimos años. Y es que robar en supermercados es algo relativamente fácil si no se cuenta con unas medidas de seguridad mínimas. Aquí veremos las formas de hurto más comunes, los productos más robados y los sistemas de seguridad más efectivos.
Formas más comunes de robar en supermercados
Los supermercados son establecimientos esenciales para nuestro día a día. A ellos vamos con regularidad, al igual que los ladrones, los cuales no dejan escapar la oportunidad para llevarse cualquier cosa. En ellos se puede robar de diferentes formas que van desde los pequeños hurtos hasta otros más organizados:
- Robo hormiga: robo de poca cantidad dedicado a coger pequeñas cosas
- A mano armada: mucho menos habituales. Generalmente, se hacen para sustraer el dinero de la caja
- Robo cuando está cerrado: actúan cuando el establecimiento está cerrado., acceden forzando la puerta
- Alunizaje: mucho menos común, solo se da en supermercados que poseen escaparate o una zona endeble
No es habitual que en los supermercados se atraque a mano armada o a través de alunizajes… En ambos casos, al igual que en los demás, disponer de un dispositivo de seguridad es fundamental para evitarlos. Cada año se pueden perder miles de euros si no se toman las medidas adecuadas contra los robos.
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Cómo evitar los robos en supermercados
Se pueden evitar de diversas maneras. Sin embargo, la combinación de algunas de ellas es la mejor forma de prevenir los hurtos.
Veamos los métodos más eficaces para evitar los robos en los supermercados:
Instalar sistemas de alarma en las salidas
El objetivo es evitar que los productos con alarmas, que generalmente son los de más valor, salgan del establecimiento. Este tipo de control es muy habitual verlo en los supermercados de gran tamaño y también en los medianos, pero no tanto en los más pequeños. Este sistema de alarma es imprescindible.
Usar alarmas adhesivas
Las alarmas adhesivas son una realidad y las podemos encontrar en cualquier producto. Se colocan fácilmente y son difíciles de retirar. A veces están escondidas en el interior del envase para una mayor seguridad. Al pasarlas por el escáner de la caja se desactivan y el cliente no tendrá ningún problema a la hora de acceder a otro local.
Colocar carteles con avisos de vigilancia
No hay nada más incómodo para un ladrón que leer carteles de alarmas estratégicamente colocados que informen a los clientes están siendo vigilados. Esto les cohibirá, pues antes de proceder a robar tendrían que realizar un estudio detallado de dónde se encuentran las cámaras o los sistemas de vigilancia.
Contratar a un vigilante de seguridad
No solo es efectivo por la tarea que cumple, sino a modo disuasorio. Un ladrón siempre va a optar por un supermercado libre de vigilantes. Estos se dedican a recorrer el establecimiento durante toda su jornada laboral. Pueden aparecer en cualquier momento.
Con ellos no es nada fácil robar cómodamente. Entendemos que puede ser caro, pero es una buena opción para supermercados grandes.
Poner espejos para eliminar o reducir los puntos ciegos
Es habitual ver espejos colocados estratégicamente en algunos supermercados. Y es que son muy efectivos a la hora de vigilar a sus clientes. De un solo vistazo se puede controlar un pasillo o una sección entera. Los ladrones huirán de esas zonas, ellos prefieren sustraer productos de los espacios menos vigilados.
No acumular demasiado dinero en efectivo en la caja
Cada empresa debería fijar una cantidad mínima y máxima que deben tener en la caja. Y cuando exceda de esa cantidad se debería retirar el excedente. Los ladrones suelen estudiar cómo trabajan los supermercados y también se fijan si estos vacían o no las cajas. Cuanto menos se vacíen, más interés tendrán ellos en hacerse con él.
Instalar cámaras de seguridad
Este sistema es el más fácil y efectivo, al igual que el vigilante de seguridad, ya que controla todo lo que ocurre en el local. Además de darnos imágenes y vídeos. Se deben colocar en lugares estratégicos para sacarles el máximo partido. Y sirven tanto para usarlas en horario comercial como durante la noche, cuando el local esté vacío.
Productos que más roban en supermercados
Se suele pensar que los productos más robados del supermercado son aquellos de primera necesidad, pero ¡no! Nada más lejos de la realidad. Solo dos de ellos forman parte de nuestra alimentación básica. Aquí te dejamos un pequeño listado con los productos más robados. Ordenados de mayores a menores cantidades:
- Bebidas alcohólicas
- Perfumes
- Pilas
- Productos cárnicos
- Conservas
- Dulces
Las bebidas alcohólicas lideran en la lista de forma evidente. Sus precios suelen ser elevados y no todos los comercios tienen alarmas para negocios para evitar estos robos. Le siguen los perfumes, junto a las cuchillas de afeitar y la cosmética, aunque no todos los supermercados tienen esta sección.
Los productos alimenticios también son objeto de robo, así como los dulces de todo género. Los productos estrella suelen ser siempre los más caros.
Este tipo de productos ya suelen estar vigilados por los supermercados a través de alarmas adhesivas y de cajas de metacrilato o vitrinas que guardan el producto en su interior.
